El envejecimiento es un proceso normal de la vida, pero como la esperanza de vida se ha alargado, buscamos vivir lo mejor posible, el mayor tiempo que se pueda. El problema está en que muchas veces nuestro hábitos son los culpables de que nos sintamos viejas, y nos veamos arrugadas, te mostramos cómo prevenir el envejecimiento.
Lucha contra el estrés
El estrés es un enemigo de nuestra salud, con el que tenemos que luchar día a día. El trabajo, la locomoción, los problemas familiares, incluso el ir de compras puede producirnos momentos de tensión, que no podemos evitar. Pero sí podemos hacer algo en relación a cómo nos sentimos frente a esas situaciones. Aprender a manejar tu estrés, ya sea realizando ejercicio físico, técnicas de relajación, etc. Te permitirá disminuir los procesos que harán que envejezcas más rápidamente.
Evita la nicotina
Fumar es un mal hábito, una adicción para muchos, que afecta seriamente a nuestra salud y nos hace envejecer más rápido. Así que mejor evita el tabaco, o déjalo, pero ¡ya!
Cuidado con el sol
Si bien el sol es nuestro aliado en muchas cosas, su exposición prolongada puede causar serios efectos en nuestra salud, no sólo en la piel, sino que puede predisponernos a enfermedades graves, como el cáncer, además de acelerar nuestro envejecimiento. Así que es mejor que evitemos las horas donde el sol es más fuerte y que usemos protector solar.
Cuidado con el azúcar
El azúcar es necesario en nuestra alimentación, pero en exceso nos puede predisponer a la diabetes, a subir de peso y a una pérdida de la elasticidad de nuestra piel. El exceso de azúcar en la sangre puede adherirse a las proteínas de la piel y destruir el colágeno y la elastina, los cuales mantienen la piel firme y elástica. Este deterioro puede conducir a las arrugas y la flacidez.
Evita dormir poco
Cuando alguien te dice “te ves cansada” tienes que entender que te está diciendo “te ves vieja”. Un mal aspecto se da si dormimos mal, porque el sueño le da a nuestra piel un merecido descanso de la tensión ambiental y psicológica. Dormir relaja los músculos faciales y permite que las capas de la piel rejuvenezcan. Pero si duermes en la misma posición, puedes casar arrugas del sueño, que puedes evitar durmiendo de espalda.
Evita el lavado compulsivo
Tu rostro no es el único lugar que muestra signos de envejecimiento. Las manos también dicen mucho de la edad de las personas. Si lavas tus manos obsesivamente te despojarás de las capas externas que protegen nuestra piel, pudiendo hacer que llevemos gérmenes a todas las partes de nuestro cuerpo.
Si evitas estos factores podrás lucir joven y mantenerte bien. En resumen nos referimos a llevar un estilo de vida adecuado, con lo que podrás estar bien por dentro y por fuera.